EL PERFUME DE GRAN PRECIO


Mateo 26:7  Vino á él una mujer, teniendo un vaso de alabastro de ungüento de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de él, estando sentado á la mesa.

En ocho versiculos el Evangelista recapitula un suceso que se dio en Betania.  Betania significa “Casa del Pobre”, “Casa de aflicción”. Por dicha definición entendemos que el lugar donde se encontraba el Señor era un lugar de mucha necesidad económica, y de mucha pobreza. Por si esto fuera poco, la casa donde suceden las cosas era de un hombre llamado Simón que tenía lepra. 

Ante la ley el leproso era un hombre a quien el Sacerdote declaraba inmundo Levitico 13.44, su ropa era quemada, y era sentenciado a caminar pregonando: -Inmundo, Inmundo, soy inmundo. (Estoy lleno de suciedad). Un leproso quedaba excluido de su familia y del pueblo, y era enviado a las afueras de la ciudad. Numeros 5.2

Sin embargo el pasaje Bíblico no nos habla de que Jesús sanó al leproso, aunque seguramente lo hizo, sino que el Evangelista mueve las cámaras para mostrarnos una imagen que llamó poderosamente la atención de los discípulos. 

Por lo menos tres evangelistas registran éste acontecimiento: Mateo 26.6-13 Marcos 14.3-9 y Juan 12.2-8 éste último nos dice que: La cena se hizo en Betania, y menciona que dentro de los invitados estaba Lazaro, quien fue resucitado de los muertos y Martha quien era la encargada de “servir”, Lazaro estaba sentado a la mesa con él, Juan 12.2 Entonces María tomó una libra de ungüento de nardo líquido de mucho precio. y ungió los pies de Jesús, y limpió sus pies con sus cabellos; y la casa se llenó del olor del ungüento…

1.- Éste es un acto de adoración y de honra al Señor. Observamos a una mujer, dando “lo mejor que tenía para Dios”, ella no vio la necesidad económica, porque sus ojos estaban puestos en Cristo, ella sabía que Cristo es solo suficiente para suplir las necesidades de nuestra vida, Mateo 6.26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni allegan en alfolíes; y vuestro padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros mucho mejores que ellas? 
Solo podremos dar lo mejor a Dios, cuando creamos que es Él quien suple todas nuestras necesidades. María fue una fiel receptora de la Palabra de Dios. Lucas 10.39 … sentándose a sus pies oía su palabra. Y Jesús dijo de esto: v42 María escogió la buena parte, la cual no le será quitada. Solo escuchando el mensaje de vida de Cristo podemos tomar desiciones tan profundamente espirituales como la que tomó María.

¿Que podría María ofrecer al Señor después de todos los beneficios que había recibido de Él? Solo por mencionar algunos. 

- Había recibido su visita en casa. 
- Había comido Jesús en su mesa. 
- Había recibido el mensaje de la Palabra en su sala. 
- Había resucitado de entre los muertos a su hermano Lazaro. 
- Había tenido el privilegio de caminar con Jesús. 

La pregunta es: ¿Que podía darle a Jesús?  La respuesta, solo lo mejor que tuviera a su alcance. Y lo que tuvo a su alcance fue un perfume de alto valor. 

2.- Pero mientras unos se esfuerzan por dar lo mejor, otros se empeñan en decir: -Pero ¿que está haciendo? Para variar es Judas quien cuestiona éste acto sublime de adoración y reconocimiento pleno a Jesús y dice: ¿Por qué no se ha vendido este ungüento por trescientos dineros y se dio a los pobres? Juan 12.5 Mire nada más ahora si le salió el espíritu ofrendador, como el típico hermano que no es capaz de despojarse de su dinero pero le fascina andar dando ideas de lo que se debe hacer con el dinero en la Iglesia. 

“Las Marías de este tiempo deben cuidarse de no oír a los Judas que andan por ahí, solo criticando las cosas que se hacen para la honra y la gloria de Dios”. Si Judas hubiera querido ayudar a los pobres hubiera vendido su perfume. ¿no? Pero mire la verdadera condición del corazón de Judas era la siguiente: Mas dijo esto, no por el cuidado que él tenia de los pobres; sino porque era ladrón, y tenia la bolsa, y traía lo que se echaba en ella. 

3.- Pero a todo esto ¿Que dijo Jesús? Dejadla, ¿Por qué la fatigáis? Buena obra me ha hecho. Marcos 14.6 “Se ha anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura”… Aquí hay por lo menos dos enseñanzas. 
a) Jesús recibió la honra de María. El no rechazo su acción. b) Esto parecía ser un aviso del Espíritu para que los discípulos comprendieran que Jesús pronto había de morir. En ocasiones somos avisados por el Espíritu mediante las circunstancias que se presentan, el problemas es que no siempre las comprendemos. Jesús dio a conocer lo que pasaría por lo menos una semana después. 

Se ungía el cuerpo de finado con hierbas aromáticas, según la tradición judía como un modo de preparación del cuerpo. 

Queridos lectores: Demos lo mejor para Dios, aun cuando otros critiquen lo que hacemos, nosotros debemos saber que el Señor es digno de nuestro mejor perfume, el más caro, el mas costoso, Él es el primero, así que no hay razón de porque no darle lo mejor. Que el Señor nos dé entendimiento en todo. 



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